La ropa en desuso que depositamos en los contenedores naranjas de Solidança / Roba Amiga sigue un circuito diseñado para maximizar su reutilización, reciclaje e impacto social y ambiental. Este proceso está gestionado por la Cooperativa Ropa Amiga, integrada por siete empresas de inserción, con el objetivo de fomentar la economía circular y dar oportunidades laborales a personas en riesgo de exclusión social.
El ciclo comienza con la recogida de la ropa en los contenedores distribuidos por la vía pública y otros puntos estratégicos. Una vez recogida, la ropa se traslada a la planta de Preparación para la Reutilización de Solidança/Ropa Amiga en Sant Just Desvern, donde pasa por un riguroso proceso de elección y clasificación para garantizar su trazabilidad. En función de su estado, la ropa se destina a distintos canales de reutilización y reciclaje.
Una parte importante de la ropa en buen estado se destina a la venta en las tiendas de Solidança/Roba Amiga y Roba Amiga Girona, sumando un total de 18 establecimientos. Estas tiendas tienen un doble objetivo: ofrecer prendas de vestir a precios asequibles y fomentar un modelo de consumo responsable y sostenible. Puedes encontrar las distintas ubicaciones en este enlace.
Además, a través del Programa de Entrega Social, la entidad también facilita prendas de vestir a familias en riesgo de exclusión social y en situación de pobreza material, en colaboración con Servicios Sociales municipales.
Cuando el mercado local no puede absorber toda la ropa recogida, ésta se comercializa en otros países que sí tienen demanda para asumirla. Esto permite generar puestos de trabajo y fortalecer las economías locales, dando una nueva oportunidad a estas prendas.
Por otra parte, la ropa que no es apta para la reutilización se destina al reciclaje. Ésta se clasifica según su composición textil (algodón, tejano, lana) y se transforma en nuevas hilaturas para la confección de tejidos reciclados gracias a nuestros proyectos de innovación. Así, se reduce la necesidad de producir materias primas nuevas y se evita el impacto ambiental asociado.
Incluso la ropa en estado irrecuperable puede tener una utilidad. Algunas prendas se destinan a proyectos innovadores como la colección de Circular Upcycling, el contenedor Circutex y Circular Wool, iniciativas que exploran nuevas formas de reutilización creativa de los residuos textiles. Además, un 5% del total recogido se destina a proyectos de cogeneración eléctrica y calorífica, contribuyendo a un modelo energético más sostenible.
El modelo de gestión de la ropa en desuso de Roba Amiga genera un doble impacto positivo:
En este impacto socioambiental, la actividad que realizamos genera puestos de trabajo destinados a itinerarios de inserción sociolaboral para personas en situación de vulnerabilidad social. Estos itinerarios incluyen acompañamiento individualizado y formación, con el objetivo de mejorar la empleabilidad y facilitar la reinserción en el mercado laboral ordinario.