A lo largo de 2022, hemos tratado 14.227 toneladas de residuos gracias a la gestión que hace Solidança de varias Deixalleries en la comarca de Barcelona. De estas 14.000 toneladas, 59 de ellas las hemos podido reutilizar, gracias a un proceso de Preparación para la Reutilización de los residuos que lleva a cabo la entidad.
Alargando la vida útil y convirtiendo los residuos en recurso, hemos podido ahorrar 244.048 kg de CO₂ en la atmósfera, todo a través de procesos de recuperación y reutilización. Estos procesos los llevamos a cabo en la planta de Preparación para la Reutilización (PxR) de Solidança, desde donde profesionales formados efectúan un servicio de calidad y profesionalidad basado en la transparencia y en la trazabilidad.
Después de recogerlos, los residuos entran en un circuito donde se reciben y registran, se revisan para su diagnóstico, y en caso de ser reutilizables pasan a la fase de reparación y comprobación en caso de aparatos eléctricos, y de selección y clasificación, en caso del textil.
Estos artículos, ahora revalorizados, se preparan para enviarse a las tiendas de segunda mano que la entidad Solidança tiene repartidas en las provincias de Barcelona y Girona.
Además de fomentar la economía circular, la gestión de las Deixalleries por parte de Solidança fomenta al mismo tiempo la economía social, creando puestos de trabajo destinados a hacer itinerarios de inserción a personas en situación de vulnerabilidad social.
Actualmente, Solidança gestiona varias Deixalleries situadas en: Montjuic, Esplugues / Sant Joan Despí, Sant Just Desvern, Viladecans y Mataró, además de las Minideixalleries de Viladecans y de Mataró.
El modelo de las Deixalleries
Solidança hemos consolidado un modelo de gestión de Deixalleries que tiene en cuenta tres ejes principales: la reutilización y la optimización del aprovechamiento de los residuos, la inserción laboral y la educación ambiental.
Un claro ejemplo de este modelo es la Deixalleria de Viladecans, reconocida como Deixalleria de 3.ª Generación. Esto quiere decir que, no es únicamente un punto de recogida de residuos, sino que provee otros servicios que suponen un valor añadido.
Además de ser un punto de recogida de residuos, es reconocida por su contribución en la creación de puestos de trabajo para personas en situación de vulnerabilidad social. Gracias a la implicación de la Empresa de Inserción Solidança Treball, el personal que trabaja en la Deixalleria forma parte de un itinerario de inserción sociolaboral gestionado por la entidad, donde colectivos en situación de vulnerabilidad social se benefician de una estancia de contratación temporal, mientras refuerzan sus habilidades para reinsertarse al mundo laboral ordinario.
Al mismo tiempo, decimos que logra la 3.ª Generación, puesto que incluye un elemento clave: la educación ambiental. La Deixalleria de Viladecans es un espacio de sensibilización, formación y concienciación ciudadana, donde poder aprender e incorporar habilidades más sanas y sostenibles con el planeta y las personas como pueden ser el huerto urbano gestionado por personas voluntarias del municipio, un hotel de insectos que se complementa con visitas de escuelas y centros de trabajo para dar a conocer el proyecto.
Desde Solidança apostamos para consolidar el modelo y extenderlo, donde las desecherías puedan acontecer espacios amables de participación, formación y prevención de residuos, así como espacios para la innovación y la creatividad.